sábado, 28 de fevereiro de 2009

¿Retoma la ONU el Plan Baker para solucionar el conflicto del Sahara?


No hay ninguna declaración oficial. Pero la filtración de algunos encuentros y el pánico provocado en Marruecos inducen a pensar que la ONU retomará el "plan Baker" para solucionar el conflicto del Sahara Occidental.

Estos días Christopher Ross, nuevo Enviado Personal del Secretario General de Naciones Unidas para el Sahara Occidental está realizando una importante gira para entrevistarse con los responsables de los países implicados y afectados por el conflicto del Sahara Occidental.
Ross se ha entrevistado con los máximos líderes de las partes en conflicto: Mohamed VI de Marruecos y Mohamed Abdelaziz del Frente Polisario.
Además, ha hablado ya con el presidente de Argelia (Abdelaziz Buteflika). No lo ha hecho con el cuestionado líder golpista mauritano, pero ya ha dicho que pronto hablará con algún responsable de Mauritania (en mi opinión, el país más importante para resolver el conflicto).
Además se dispone a entrevistarse con altos responsables en Madrid (Angel Lossada, Secretario de Estado de Asuntos Exteriores), París y Washington. Es la primera vez que un Enviado Personal de la ONU incluye a USA en la ronda de contactos, lo que pone de manifiesto el compromiso de los Estados Unidos en implicarse en la solución de este problema. Además, esta visita a Washington no estaba anunciada de antemano, en lo que algunos ven un "toque" a la injerencia de Francia en su labor, manifestada por una declaración del Quai d'Orsay apoyando la propuesta marroquí.

Las declaraciones de Ross a lo largo de la gira han sido escasas, pero significativas. Lo suficiente como para no dar crédito a quien afirma:

La cuarta gira del enviado especial de la ONU por Argelia, Tinduf y Marruecos ha concluido con un fracaso sin paliativos.

Penoso comentario porque:
1. Ni es la "cuarta gira"
2. Ni es el "enviado especial"
3. Ni la gira ha "concluido"

Y digo que no parece que haya que dar crédito a lo del "fracaso" anunciado por varias razones que son éstas:

1º. Ross, contra lo que pretendía Marruecos, no va a "continuar" la mediación allí donde la dejó el anterior Enviado Personal, el pro-marroquí Peter van Walsum. Ni una alusión a Walsum ni a sus propuestas. Muy significativo.

2º. Ross ha dejado claro que pretende una solución que respete el "derecho a la autodeterminación de los saharauis".

3º. Ross ha declarado que sus entrevistas han sido "útiles".

4º. El jefe de la delegación negociadora del Frente Polisario, Mahfud Ali Beiba, ha dicho que Ross ha presentado una "hoja de ruta" a la que el Frente Polisario dará una respuesta. El hecho de que no se haya rechazado de plano revela que no tiene nada que ver con las rechazadas propuestas de Walsum. Es más, Ali Beiba se ha declarado "optimista".

Esto son las declaraciones públicas de los implicados.

A esto conviene sumar las filtraciones y las declaraciones oficiosas marroquíes que ponen de relieve el nerviosismo del majzén.

Por un lado, en la prensa argelina, La Nouvelle République (24-II-2009), ha dicho que

Se habla con insistencia de una nueva proposición que podría satisfacer a los dos beligerantes. Esta solución mediana consiste en el otorgamiento durante un período preciso de una amplia autonomía antes de organizar un referéndum en el que los saharauis se pronunciarán sobre el porvenir de sus territorios ocupados por Marruecos después de 1975

Por otro, la prensa marroquí cercana al majzén, Aujourd'hui le Maroc (24-II-2009), presa del pánico "denuncia" que

La nueva estrategia argelina consiste en hacer el máximo de bloqueo y sacar, a continuación, la receta "autonomía-referéndum" como proposición que el Polisario pondría sobre la mesa de negociaciones.
Revivir el folletón Baker, otra vez, no es aceptable

Por si fuera poco, cunde en el Majzén la sensación que el encuentro con Ross que se preparó para escenificar la supuesta "unanimidad" de los partidos marroquíes en el asunto se ha vuelto contra ellos. Dice el diario arabófono As-Sabah (25-II-2009):

As-Sabah ha sabido por fuentes bien informadas que las altas esferas no han apreciado el modo en que algunos líderes de los partidos políticos hablaron sobre el Sahara durante su cena de encuentro con el Enviado de Naciones Unidas Christopher Ross. Estas fuentes informan de que esta irritación se debe al modo en que algunos líderes de los partidos políticos abordaron el asunto (...).
Un líder de un partido político habló con detalle sobre el asunto del Sahara pero cometió varios errores de protocolo cuando habló de algunos sinsentidos históricos a un diplomático americano que conoce la región del Norte de África muy bien. El líder dio una idea expansionista de Marruecos cuando habló de Tinduf y Bechar (que hoy son argelinas) como partes del territorio marroquí. Dijo incluso que Marruecos se desprendió de sus territorios del sur con la emergencia de un Estado independiente que es Mauritania.
Durante la cena, el Enviado Personal de la ONU no reaccionó a los distintos discursos de los partidos políticos. (...)
El informe sometido a las altas esferas mencionó que algunas de estas intervenciones han servido inintencionadamente a la tesis argelina según la cual Marruecos es un país expansionista que desea ejercer la hegemonía en la región del norte de África. Son las mismas tesis que los líderes del Polisario repiten cuando tratan del asunto del Sahara.
Christhopher Cross es uno de los mejores conocedores de la región. Cuando era Embajador de USA en Argelia, ayudó a frustrar un acuerdo de ventas de armas a Marruecos que iban a ser usadas para luchar contra el Polisario, añaden estas fuentes.

Todas estas declaraciones me inducen a pensar que es muy probable que Ross esté presentando, como fórmula de solución del conflicto, el "plan Baker" con algunos retoques.

No sería extraño. Como ya he dejado escrito, en mi opinión, el plan Baker es la "estación de término" en la búsqueda de soluciones al conflicto: hay varias soluciones, pero sólo ésta es una solución de "compromiso" y "realista" que se acerque al derecho a la autodeterminación del pueblo saharaui. Dije esto en el año 2003. Estamos ahora en el 2009. Me temo que el tiempo me ha dado la razón.

quarta-feira, 25 de fevereiro de 2009

Foreign friends


History demonstrates that unpleasant regimes bent on suppressing dissent and menacing their neighbours can always find foreign apologists who are ready to scurry to their defence without bothering to understand precisely what it is they are defending. It seems that Morocco is no exception in having an army of foreign sycophants ready to fight for its right to expand its territory through force and stamp on anyone who might object to its imperial designs. A growing chorus of appeasement can be heard from lobbyists, politicians and certain elements of the media by anyone who tunes into the news on Western Sahara.

The Francophone world has always been keen on Morocco’s occupation of Western Sahara (with some noble exceptions), and this phenomenon shows no sign of abating. The latest bare-faced brown-nosing comes from the mayor for Woippy (no, I’d never heard of it either), François Grosdidier, who also happens to be vice-president of the French-Moroccan friendship group in the French parliament. In a article in Religious Intelligence (no jokes please) he is quoted regurgitating the Moroccan line. Here are a couple of choice quotes:

“Given Morocco’s legitimacy on the Sahara, this autonomy initiative, under the kingdom’s sovereignty, is wise and generous, and provides an honourable way out for all the parties.”

“[The Polisario] approach is useless, there is no point (for them) in continuing and they are no longer in the sense of history.”

It seems that French politicians love to talk about being part of history - Sarkozy has claimed that one of the problems with Africa is that “the African man has never really entered history“. Oh dear - despite the benefits of colonialism and the heroic attempts of Europe to civilise the benighted continent, not to mention all those fantastically well-conceived post-colonial development initiatives, those ungrateful Africans haven’t grasped the nettle of historical progress and lifted themselves “up” to the same level as Europe. What a pity Sarkozy doesn’t realise that ideas of historical progress are based on perversions of Darwinian evolutionary theory that have more to do with justifying racism and colonialism than they do with rational scientific enquiry. Unfortunately the dogma of historical progress is still used to justify aggression dressed up as the promotion and extension of civilisation - something else I’ve noticed in the arguments of those that support Rabat’s military push into the Sahara. But I digress.

Grosdidier also claims that the Western Sahara conflict is impairing international relations, and uses this as an argument for supporting the autonomy initiative. As I’ve argued on several previous occasions (e.g. here), this is indicative of a poor understanding of the the situation, as the autonomy plan does not address the reality of partition or the issue of the refugees around Tindouf - as if Morocco would welcome tens of thousands of independence-minded Sahrawi and make any real attempt to come to an agreement with the Polisario. Grosdidier says that “pluralism does not exist” in the camps, but I don’t see too much evidence of it in occupied Western Sahara either.

I sometimes wonder what drives certain European politicians (and I include the UK here) who seem so eager to offer their services to foreign governments, effectively acting as agents of foreign powers with little or no regard to the interests of the people whom they have been elected to serve. After Blair’s stint as Bush’s enforcer/poodle (delete according to your preference), which served only to support ill-conceived foreign policy adventures and increase risks to British citizens, some of us are a little annoyed with this sort of behaviour. Well, maybe it’s just the money, the power, the foreign junkets, or a simple messiah complex.

It’s not only politicians that are busy appeasing Moroccan aggression, and not only in Europe. I keep receiving news alerts from the African Press Agency (with the byline “Unity is in Truth”), based in Dakar, Senegal, which could have been written by the Moroccan interior ministry. A common theme is how so-and-so supports the autonomy initiative or hails Morocco’s commitment to solve the conflict. The border between Western Sahara and Morocco is conspicuous by its absence on the the maps on the APA website. Hell, they could even use a dashed line rather than a solid one if they wanted to reflect its unresolved status, but I suppose even that would be too much for their Moroccan friends.

Another unedifying spectacle is this love-in between the author and the outgoing Moroccan ambassador. Reading it is like watching two extremely ugly people make out in public - a nauseating experience which makes you think “is that really necessary?” (No offence intended to the extremely ugly by the way.)

The Lebanese Dar al-Hayat has also been at it, or at least one Mohammed el-Ashab has, writing in its pages. el-Ashab talks about the Sahrawi’s “popular reluctance to unite under one umbrella”, which he claims is the biggest obstacle to solving the conflict. So not the partition or the blocking of the referendum then? To cast the problem as one of divisions between the Sahrawi rather than one of invasion, occupation, displacement and partition is disingenuous to say the least. He also talks about “the cease-fire which classified the areas outside the security fence as buffer zones in which no military or civilian movement is allowed.” Well, actually, it didn’t. The buffer zone, into which neither side is allowed, extends for only 5km east and south of the berm, i.e. in the Polisario controlled areas. Restricted areas extend for 30km either side of the berm, and no arms are to be carried in these areas. Outside of the restricted areas are two vast “areas with limited restrictions” in which normal military activity is allowed with the exception of anything that would constitute a concentration of firepower. As I’ve pointed out before, these conditions of the ceasfire are set out on the MINURSO website, which Mohammed el-Ashab evidently has not bothered to examine before putting pen to paper, or fingers to keyboard. Not that he’s unusual in such uninformed pontificating (or is it deliberate misinformation?). Using elections as his theme, el-Ashab strives to convince us that everyone (the UN, the EU) is happy to see Morocco “practicing sovereignty in all its forms - including holding elections in all parts of the country since 1978″. I assume the country he is referring to is a putative greater Morocco which incorporates all of Western Sahara, although he doesn’t make it clear how Morocco has been or will be holding elections in the parts of Western Sahara that it doesn’t control. From his statement about “the frequent announcement of the “Polisario Front” that it operates in regions described as “liberated lands”" it seems that he might believe Morocco’s propaganda line that the Polisario doesn’t control any territory in Western Sahara, but this is not clear. I like the placing of “Polisario Front” in inverted commas - usually a sign of hostility.

There’s much more where all the above came from, and I’ll perodically highlight it. Of course if you want a real giggle you can always go to any number of websites whose purpose is to promote Moroccan interests and push pro-Morocco propaganda, such as that of the Morocco Board, the Moroccan-American Center for Policy, Maghreb Arabe Presse, CORCAS, or the dedicated anti-Polisario (and personal defamation) sites such as Polisario Confidential, Polisario Think Twice, Polisario Cannibals and Polisario Human Sacrifice. OK, I made the last two up, but those are about the only allegations that Morocco has not leveled at the Polisario.

All of this propaganda is designed to give the impression that the conflict is effectively over and that Moroccan control over Western Sahara is all but a done deal. The point of all the misinformation dissemminated by Morocco and its foreign toadies is to persuade people that all they have to do is endorse the situation on the ground and the issue of Western Sahara will go away, userhing in a new era of regional cooperation, development and progress. But of course it won’t, as long as Western Sahara remains partitioned and between 100,000 and 200,000 disaffected Sahrawi remain in camps in the inhospitable Algerian desert. Even if Morocco’s autonomy plan is officially endorsed by the likes of the EU, the USA and the UN, the reality on the ground will still poison the politics of the region. And the African Union still stands behind the Polisario and the Sahrawi’s right to self-determination. Morocco may be planning to further entrench its position by invading the Polisario controlled areas once its autonomy plan gets the green light from the world’s major political powers, but this is hardly likely to achieve the stated aims of all those foreign politicians and pundits who are so keen to promote autonomy in the name of progress.

segunda-feira, 23 de fevereiro de 2009

Com objectivo de preparar nova ronda negocial Sara Ocidental: Enviado da ONU reuniu com a Frente Polisário


Rabuni – O novo enviado especial da ONU para o Sara Ocidental, Christopher Ross, esteve este fim-de-semana nos acampamentos de refugiados sarauis em Tinduf, sudoeste argelino, com o objectivo de relançar o processo de negociações entre Marrocos e a Polisário.
Acolhido nos acampamentos por uma tradicional multidão de mulheres sarauis, Christopher Ross foi recebido no sábado, 21 de Fevereiro, pelo primeiro-ministro saraui Abdelkader Taleb Oumar, além do coordenador das relações com a Minurso, Mhamed Khadad, pelo ministro do interior Boullahi Sid assim como por representantes de instituições sarauis presentes nos campos que acolhem 165 mil refugiados.

Domingo, 22 de Fevereiro, o diplomata americano reuniu com o presidente da RASD e secretário-geral da frente polisario, Mohamed Abdelaziz, o qual manifestou ao enviado da ONU que a Frente Polisário está pronta a reiniciar as negociações sem condições com Marrocos sob os auspícios da ONU «no quadro do respeito de todas as resoluções das Nações Unidas».

Após a súbita substituição de Peter van Walsum, o qual bloqueou o processo negocial entre Marrocos e a Frente Polisário, Ban Ki Moon nomeou a 27 de Agosto 2008 Christopher Ross, antigo diplomata americano na embaixada americana na Argélia, como enviado especial da ONU para o Sara Ocidental.

Para Mhamed khadad, membro da delegação da Frente Polisário nas negociações com Marrocos, Christopher Ross conhece perfeitamente bem o dossier do Sara Ocidental e confirmou que reunira com Ross entre 2007 a 2008 na ONU quando o diplomata era membro da delegação americana na assembleia geral Nações Unidas.

O mesmo responsável da Polisário lembrou que após destituição de Peter van Walsum, o qual manifestara posições favoráveis à anexação marroquina do Sara Ocidental, Marrocos bloqueou durante meses o nome escolhido por Ban Ki Moon. «Neste momento Marrocos está desiludido e frustrado pois pensava, e promoveu, que o seu plano de autonomia seria aplicado e que o problema acabara» afirmou Khadad.

A PNN apurou que o V «round» das negociações entre a Polisário e Marrocos poderá acontecer em Abril. Assente na tese de Peter van Walsum que considerou «irrealista a independência do Sara Ocidental» Rabat insiste que a nova ronda negocial não deve partir do «ponto zero».

«Em que pondo estávamos para Marrocos dizer que não devemos começar no ponto zero? Tivemos quatro encontros e não avançamos nada. Marrocos recusou tudo em bloco, mesmo as nossas propostas mais simples de carácter cultural ou desportivo», reagiu Khadad.

Para a Polisário a resolução da questão do Sara Ocidental e a aplicação do direito à autodeterminação do povo saraui, defendido pela ONU, depende da vontade politica da comunidade internacional.

Presa pelos interesses económicos a UE alinha diplomaticamente pelas posições marroquinas e multiplica os acordos comerciais relativos aos territórios marítimos e do Sara Ocidental com Marrocos, «fechando os olhos» às violações marroquinas nos territórios anexados. A Polisário reage criando a Zona Económica Exclusiva (ZEE) da Republica Árabe Saraui Democrática (RASD) que lhe permitirá de passar à «ofensiva jurídica» contra o tratado de pescas assinado em 2005 entre a União Europeia e Marrocos, e defender outros interesses económicos dos sarauis nos territórios anexados, explicou o representante da Polisário em Paris, Omar Mansour.

Com a eleição de Barack Obama as posições dos Estados Unidos podem mudar, no entanto Mhamed Khadad é prudente afirmando que ainda não conhecem a politica exterior da nova administração mas a ruptura com carácter ideológico da antiga administração «já é um avanço positivo». Khadad considera também que a eleição de Obama marcou «o fim da administração imperialista de Bush que dava um apoio incondicional e flagrante ao poder e posições marroquinas».

Apesar das expectativas depositadas em Christopher Ross na resolução do problema do Sara Ocidental o diplomata americano confronta-se com uma paz precária na região e a inflexibilidade de Rabat em aceitar um referendo para a autodeterminação que preveja a independência do território, tentando impor o seu projecto de «autonomia alargada». Por outro lado a Frente Polisário exige que sejam respeitadas as resoluções da ONU que prevêem a auto determinação do povo saraui e defende que «a questão do Sara Ocidental é um problema de descolonização criado em 1975 por Espanha quando Madrid retirou da sua antiga colónia abrindo as portas à ocupação marroquina».

Entretanto a tensão aumenta na região. A direcção da Polisário tenta travar a juventude saraui que considera que cerca de dois decénios à espera que a ONU resolva a questão são excessivos e «a paciência tem limites». A incorporação massiva de jovens voluntários nas fileiras da Polisário são também um preocupante sinal da vontade expressa pela juventude de resolver a questão pela via armada, confirmou Omar Mansour.

Por outro lado, Marrocos tem reforçado as suas posições militares no «muro defensivo» que separa o Sara Ocidental anexado dos territórios controlados pela Polisário. «Temos de estar preparados a qualquer situação, e contar que Marrocos pode passar à ofensiva» disse Khadad.

domingo, 22 de fevereiro de 2009

Negociação em vez de guerra


Desde 1991, há 18 anos, o Sara Ocidental espera que a ONU cumpra o prometido sobre o seu futuro. Agora chega a notícia (Enviado da ONU encontra-se com a Polisário para discutir Sara Ocidental) de que o novo enviado especial das Nações Unidas para o Sara Ocidental, Christopher Ross, está em Tinduf, no Sudoeste da Argélia, para conversações com responsáveis sarauis sobre o relançamento do diálogo com Marrocos.

Ross foi recebido pela população e os responsáveis sarauis nos campos de refugiados e explicou, na altura, que a sua missão é encontrar uma solução aceitável pelas duas partes – Marrocos e a Polisário – que permita ao povo saraui “determinar o seu futuro”.

Tem sido aqui defendido que há vantagem na resolução dos conflitos entre estados pela via negocial em vez do recurso à guerra. Oxalá esta inciativa de Christopher Ross obtenha o desejado êxito.

Também hoje chegou a notícia (Taliban e Governo concordaram num cessar-fogo no Vale de Swat) de que Combatentes taliban e funcionários governamentais concordaram num “cessar-fogo” no Vale de Swat, no Nordeste do Paquistão, uma das regiões mais instáveis do país. Parece que esta semana foi alcançado um acordo com as autoridades paquistanesas para impor a "sharia" (lei islâmica) no vale de Swat. Será desejável que daqui resulte estabilidade e desenvolvimento da região, no sentido de liberdade e bem-estar da população. Porém, há quem receie fundamentadamente o risco de aventuras insensatas num Estado dotado de arma nuclear. Esperemos que haja bom senso e sentido de humanidade.

Um outro aspecto de diálogo, e intenção de criar bom entendimento em clima de confiança e transparência, vem da visita de Hillary Clinton à China (Clinton afirma que EUA e China podem retirar o mundo da crise) em que parece ficar evidente a consciência da actual administração americana de que a guerra será a última solução, só depois de se esgotarem as capacidades e condições de diálogo e negociação.

Certamente, haverá muitos mais exemplos da prioridade dada à resolução pacífica de atritos internacionais, evitando a guerra, mas estes três exemplos já dão esperança de que o mundo está a tornar-se mais pacífico e respeitador dos direitos e das características do outro. Um ambiente de abertura, confiança e dialogo só traz vantagens à Paz internacional.

Cambodia's missing accused


In an article for the Guardian, John Pilger calls on his long experience with Cambodia's struggles in lamenting missing faces in the dock at the UN-backed trial of crimes committed during the Khmer Rouge period. Where are Pol Pot's accomplices and collaborators in the West?

At my hotel in Phnom Penh, the women and children sat on one side of the room, palais-style, the men on the other. It was a disco night and a lot of fun; then suddenly people walked to the windows and wept. The DJ had played a song by the much-loved Khmer singer, Sin Sisamouth, who had been forced to dig his own grave and to sing the Khmer Rouge anthem before he was beaten to death. I experienced many such reminders in the years following Pol Pot’s fall.

There was another kind of reminder. In the village of Neak Long, a Mekong River town, I walked with a distraught man through a necklace of bomb craters. His entire family of 13 had been blown to pieces by an American B-52. That had happened almost two years before Pol Pot came to power in 1975. It is estimated more than 600,000 Cambodians were slaughtered that way.

The problem with the United Nations-backed trial of the remaining Khmer Rouge leaders, which has just begun in Phom Penh, is that it is dealing only with the killers of Sin Sisamouth and not with the killers of the family in Neak Long, and not with their collaborators. There were three stages of Cambodia’s holocaust. Pol Pot’s genocide was but one of them, yet only it has a place in the official memory. It is highly unlikely Pot Pot would have come to power had President Richard Nixon and his national security adviser, Henry Kissinger, not attacked neutral Cambodia. In 1973, B-52s dropped more bombs on Cambodia’s populated heartland than were dropped on Japan during all of the Second World War: the equivalent of five Hiroshimas. Declassified files reveal that the CIA was in little doubt of the effect. “[The Khmer Rouge] are using damage caused by B52 strikes as the main theme of their propaganda,” reported the director of operations on May 2, 1973. “This approach has resulted in the successful recruitment of a number of young men [and] has been effective with refugees.” Prior to the bombing, the Khmer Rouge had been a Maoist cult without a popular base. The bombing delivered a catalyst. What Nixon and Kissinger began, Pol Pot completed.

Kissinger will not be in the dock in Phom Penh. He is advising President Obama on geo-politics. Neither will Margaret Thatcher, nor a number of her comfortably retired senior ministers and officials who, in secretly supporting the Khmer Rouge after the Vietnamese had expelled them, contributed directly to the third stage of Cambodia’s holocaust. In 1979, the US and British governments imposed a devastating embargo on stricken Cambodia because its liberators, Vietnam, had come from the wrong side of the cold war. Few Foreign Office campaigns have been as cynical or as brutal. At the UN, the British demanded that the now defunct Pol Pot regime retain the “right” to represent its victims at the UN and voted with Pol Pot in the agencies of the UN, including the World Health Organisation, thereby preventing it from working inside Cambodia.

To disguise this outrage, Britain, the US and China, Pol Pot’s principal backer, invented a “non communist” coalition in exile that was, in fact, dominated by the Khmer Rouge. In Thailand, the CIA and Defence Intelligence Agency formed direct links with the Khmer Rouge. In 1983, the Thatcher government sent the SAS to train the “coalition” in landmine technology – in a country more seeded with mines than anywhere on earth except Afghanistan. “I confirm,” Thatcher wrote to opposition leader Neil Kinnock, “that there is no British government involvement of any kind in training, equipping or co-operating with Khmer Rouge forces or those allied to them.” The lie was breathtaking. On June 25, 1991, the Major government was forced to admit to parliament that the SAS had been secretly training the “coalition”. Unless international justice is a farce, those who sided with Pol Pot’s mass murderers ought to be summoned to the court in Phnom Penh: at the very least their names read into infamy’s register.

quinta-feira, 19 de fevereiro de 2009

Droga y corrupción en Marruecos y la instrumentalización islamista


La intervención de varios alijos de droga en la zona del Estrecho y masivas operaciones anticorrupción en Marruecos crean un ambiente propicio para el activismo islamista, tanto el terrorista de los yihadistas salafistas - que tradicionalmente han tenido en el marginado norte marroquí una zona propicia de reclutamiento - como el “moralizante” de las corrientes políticas legales o toleradas, Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD) y Justicia y Caridad, respectivamente, que utilizan la denuncia de esta realidad para socavar todo lo posible al sistema.

La creciente visibilidad de la droga y su impacto en la región

Los últimos días de enero han sido especialmente relevantes en lo que a la intervención de alijos de droga respecta tanto en Marruecos como en España. De hecho, en Ceuta y otros rincones de España las Fuerzas de Seguridad del Estado han debido de trabajar a destajo mientras en suelo marroquí se producían tanto intervenciones de alijos como operaciones anticorrupción que ponían en evidencia la connivencia de algunos elementos de las Fuerzas de Seguridad, de las Fuerzas Armadas Reales (FAR) y de las autoridades políticas y administrativas en tan lucrativo negocio.

El desmantelamiento de una red de tráfico de droga en Nador ha sido sin duda alguna la operación más espectacular de las producidas en los últimos tiempos al otro lado de la frontera. Hasta el 28 de enero habían sido detenidas un total de 92 personas en esta operación. Entre los 92 citados se encuentran 22 civiles, entre ellos dos abogados de Nador; 29 miembros de la Marina Real; 17 de la Gendarmería Real; 23 de las Fuerzas Auxiliares y un mando de las Fuerzas Armadas Reales (FAR). Esta implicación de miembros de fuerzas de seguridad y de militares ha obligado a la Brigada Nacional de Policía Judicial (BNPJ), dirigida por Abdelhaq Khyam, y no a la Brigada de Estupefacientes, a centralizar las investigaciones de tan importante operación.[1] Las detenciones habían comenzado a producirse en la ciudad desde principios de año, con la desaparición progresiva de personas, inencontrables para sus familias y que al final del mes han ido apareciendo en el largo inventario de detenidos.[2] El Juez Instructor de Casablanca inculpaba el 23 de enero de constitución de banda criminal, tráfico de drogas y corrupción a 29 miembros de la Marina Real - entre ellos a 5 comandantes -, a 17 gendarmes - 5 de ellos suboficiales - y a 15 agentes de las Fuerzas Auxiliares, casi todos ellos destinados en Nador y encarcelados preventivamente en la Prisión de Oukacha, en Casablanca.[3]

Esta redada, que los medios marroquíes califican de los “los diez días que han cambiado la lucha antidroga en Marruecos”, ha costado el cargo al Almirante Mohamed Berrada, Inspector Jefe de la Marina Real.[4] Entre los momentos más importantes de esta larga operación - se habla de seis meses de seguimientos intensos de los principales sospechosos - destaca la detención en Nador el 11 de enero del presunto narcotraficante Mhamed Lghani, activo tanto en la vía terrestre como marítima de este tráfico ilícito y que habría conseguido corromper a elementos de las fuerzas de seguridad - Fuerzas Auxiliares y Gendarmería Real - y de las FAR, en este caso de la Marina Real. Lghani mantenía contactos con clientes en Bélgica, Holanda y España pero los medios marroquíes han aprovechado esta ocasión para destacar la importancia de la frontera con nuestro país, donde han destacado que encuentran escondite al menos dieciséis importantes narcotraficantes marroquíes, y cebarse con la existencia de los “enclaves” de Ceuta y Melilla o incluso del islote de Perejil que servirían, según dichas fuentes interesadas, para alimentar estas actividades ilícitas y la corrupción que arrastran.[5] Cualquier situación es buena para explotarla en términos de política exterior inventándose teorías conspiratorias sobre “el papel de España” en el incremento de la delincuencia en Marruecos.[6] Lo que sí es cierto es que hay españoles involucrados en las redes del narcotráfico y que actualmente 219 individuos de nuestra nacionalidad cumplen condena en prisiones de Marruecos por tráfico de drogas.[7] El problema es que esta situación no es nueva pues ya en el verano de 2006 era detenido otro traficante, Mohamed El Kharraz, que denunció en sus declaraciones ante la Policía a 36 militares, gendarmes y policías que acabaron siendo condenados: uno de ellos fue el Comisario Jefe de la Seguridad de los Palacios Reales, Abdelaziz Izzou, quien está actualmente cumpliendo condena en la Prisión de Oukacha.[8]

La detención de Lghani pareció dar la orden de salida a operaciones inmediatamente posteriores e importantes, tanto dentro como fuera de Marruecos. El mismo día 11 las policías de Suecia y de Noruega detenían a una red de narcotraficantes formada por ciudadanos alemanes, noruegos y marroquíes y, por otro lado, la frontera con Marruecos era escenario de varias intervenciones de alijos de droga. El día 13 era desmantelada una red de traficantes que utilizaban lanchas rápidas para transportar droga a España desde las costas próximas a Nador, en concreto desde Kariat Arekmane, Bougafer, Gourougou, Cap de l’Eau y Dchar Rana, y a la que también se le descubrían conexiones con elementos de las Fuerzas Auxiliares, de la Gendarmería Real y de la Marina Real. El 27 de enero la Gendarmería Real interceptaba un camión cargado con casi 4 toneladas de hachís en Kenitra, a unos 40 kilómetros al norte de Rabat, y este alijo elevaba hasta las 8, 3 las toneladas de dicha droga interceptadas en Marruecos tan sólo en el mes de enero.[9] En España cabe destacarse una importante lista de operaciones antidroga contra traficantes que se abastecían en Marruecos y que ha permitido la incautación en enero de una tonelada y media de hachís tan sólo en Ceuta, y señalar también una operación conjunta Guardia Civil-Cuerpo Nacional de Policía que permitía desmantelar toda una red dedicada al paso de hachís desde Marruecos con detenciones en Alicante, Almería, Valencia, Totana, Lorca y Ceuta.[10]

De la importancia del tráfico en suelo marroquí da fe la destrucción en Kenitra, el 28 de enero, de siete toneladas de droga, y la de 3 toneladas al día siguiente en Al Hoceima, y de la necesidad de hacer frente a esta verdadera amenaza en clave de coordinación internacional lo da la decisión de la Unión Europea (UE) de crear un Centro de Coordinación para la Lucha Anti-Droga en el Mediterráneo (CECLAD-M), idea surgida en la Conferencia de Ministros del Interior del Mediterráneo Occidental (CIMO) en su reunión de Nuakchott, el 22 de mayo de 2008, y que ha sido afortunadamente comunitarizada.[11]

Por otro lado, la involucración de políticos y de responsables administrativos marroquíes en estas actividades ilícitas no puede producirse en peor momento dado que enero ha sido en Marruecos el mes del nombramiento de Walis y de gobernadores por todo el país, producido el 22 de enero, así como el de la preparación de cambios también entre los responsables de la seguridad, tanto prefectos de policía como jefes de la seguridad regional.[12] Alejadas del tráfico de drogas hemos de situar también manifestaciones torcidas del ejercicio del poder público por parte de funcionarios marroquíes en otras actividades, cuestión esta que mancilla la imagen del régimen y que alimenta el mensaje purista de los barbudos “moderados” y el radical de los yihadistas salafistas, tal y como lo mostraba la operación anticorrupción en el ámbito inmobiliario lanzada en enero en el barrio Lahraouiyine de Casablanca.[13] En cualquier caso la envergadura de la operación antidroga que ha colocado en el disparadero a tantos funcionarios de las fuerzas de seguridad y armadas marroquíes va a establecer, sin ninguna duda, un antes y un después a la misma.[14]

Como hiciéramos recientemente al referirnos al problema de la droga en Afganistán, también en Marruecos se intenta desde hace años aportar soluciones no exclusivamente policiales y judiciales a esta verdadera amenaza a la seguridad que es la producción y el tráfico de estupefacientes. Si en Afganistán es The Senlis Council la institución encargada de aportar alternativas en términos de propuestas de legalización parcial de la producción de opio con fines médicos, en Marruecos es la Asociación de Derechos Humanos en el Rif, presidida por el muy inquieto Chakib El Khayari, la que ha propuesto legalizar el cannabis ya que las políticas de erradicación y las de sustitución de cultivos no han hecho sino afectar negativamente a las frágiles economías de los campesinos - a fines de 2006 unas 89.900 familias vivían del cultivo del cannabis - o bien desviar los tráficos hacia las drogas duras e incluso las armas, cuestión esta última que enlaza peligrosamente con la amenaza representada por el terrorismo yihadista salafista.[15] Ajeno a estos debates el régimen marroquí confía en erradicar paso a paso la producción de aquí al año 2018 y considera ya un avance que Marruecos haya pasado de ser el primer productor mundial de cannabis al segundo, precisamente a continuación de Afganistán.[16]

Las maniobras islamistas en aguas revueltas

Los islamistas legales - del PJD - y los tolerados - de Justicia y Caridad - se han venido moviendo con especial agilidad en el contexto convulso aquí descrito. Además, han tratado de explotar también, como era de esperar, la ocasión ofrecida por la muy mediática guerra entre Israel y los terroristas del Movimiento de Resistencia Islámica palestino (Hamas) en la franja de Gaza para poder hacerse más visibles e influyentes en una arena política en la que deben de andar, necesariamente, con pies de plomo, y más ahora que se acercan las elecciones locales.[17] Ante estos comicios, verdadera prueba de fuego tras el éxito limitado obtenido por el PJD en las elecciones generales de septiembre de 2007, los islamistas legales pretenden lograr avances en el medio rural, sector de enorme peso en el país, baluarte tradicional del apoyo a la monarquía y que, en lo que al norte respecta, tiene en la producción de cannabis una de sus principales actividades.[18]

Así lo hacen, seguidos muy de cerca por los servicios del Ministerio del Interior de Chakib Benmoussa, que el 29 de enero revocaban a Aboubakar Belkora, alcalde de Meknes, la antigua Mekínez, una de las zonas más sensibles por la implantación en los últimos años de algunas células armadas islamistas. Belkora es una de las figuras más visibles del PJD dada su gestión del ayuntamiento de una de las cuatro ciudades imperiales de Marruecos - las otras son Rabat, Fez y Marrakech - y la cortapisa ahora impuesta desde el Ministerio del Interior, justificada por presuntas irregularidades cometidas en la gestión municipal, se ha dirigido contra uno de los líderes más emblemáticos del partido islamista legal y contra el emblemático poder urbano del mismo.[19]

El terrorismo yihadista salafista no se hace visible últimamente gracias a las sucesivas operaciones preventivas de las fuerzas de seguridad pero ello no quita para que periódicamente haya alertas, tal y como ocurriera a mediados de noviembre.[20] La ausencia de atentados desde el verano de 2007 es una buena noticia pero no debe de llevar a creer que la amenaza del yihadismo salafista no existe en Marruecos, o que es insignificante. En el Reino las evidencias de la existencia de dicha ideología se encuentran en las múltiples operaciones policiales preventivas, que ya hemos estudiado en Análisis anteriores, y en los ímprobos esfuerzos de la autoridades por neutralizar el radicalismo evitando que este se extienda por los diversos sectores del Estado y de la sociedad.[21] Entre estos esfuerzos cabe destacar por la importancia que ello tiene para España y el resto de Europa la dinamización de los 18 miembros del Consejo de Ulemas de la Comunidad Marroquí en Europa, creado el pasado septiembre y que celebraba una reunión en Rabat en los días 24 y 25 de enero en la que se llamaba a la moderación y a la tolerancia, se rechazaba el extremismo en favor del diálogo entre las diferentes culturas y religiones - todo un guiño a la Alianza de Civilizaciones que celebrará en abril en Estambul su próxima cumbre - y, de paso y de forma subrepticia para quienes no quieren o no pueden verlo, se introducía la aproximación religiosa y de impronta marroquí por doquier con las consecuencias que ello pueda tener en el medio plazo.[22]

El momento es además especialmente sensible ante el confuso mensaje enviado a las autoridades marroquíes por terroristas encarcelados de la Yihadiya Salafiya, con Hasán Al Jatab, dirigente de la red Ansar al Mahdi y condenado a 25 años de prisión, a la cabeza, en la que dicen reconocer a la monarquía y muestran su deseo de abandonar la violencia.[23] El contenido que ha trascendido de dicha misiva - a la que no se sabe cuántos de los alrededor de 900 presos yihadistas se adhieren - afirma la legitimidad de la monarquía como “edificio fuerte contra el laicismo y garante de la continuidad de la identidad musulmana” y en su siempre retorcido pensamiento aboga por introducir una cuota de ulemas en los consejos electos, abrir los medios de comunicación a los islamistas y permitir a voluntarios combatir en Irak, Palestina y Afganistán. Es decir, quieren que todo lo que están intentando ahora por la vía clandestina y terrorista sea aceptado de buena gana, e incluso institucionalizado, por las autoridades. Islamización creciente de la política y de la administración, acelerando el proceso ya en marcha en Marruecos, Argelia y otros países árabes de nuestro entorno, y legalización del envío de terroristas a los escenarios del combate yihadista salafista más emblemáticos de la actualidad. Esto es delirante y a la vez muy preocupante, y ello porque en el contexto actual de visibilidad creciente de la corrupción - en la que la producción y el tráfico de drogas tienen un protagonismo enorme así como la demonización del vecino, España y Europa, como supuesto facilitador de dicha corrupción y como mercado natural de la droga producida - el mensaje moralizante de los islamistas más o menos radicalizados va a encontrar el mejor terreno abonado para su propagación.



Carlos Echeverría Jesús (Madrid, 26 de marzo de 1963) es Profesor de Relaciones Internacionales de la UNED y responsable de la Sección Observatorio del Islam de la revista mensual War Heat Internacional. Ha trabajado en diversas organizaciones internacionales (UEO, UE y OTAN) y entre 2003 y 2004 fue Coordinador en España del Proyecto "Undestanding Terrorism" financiado por el Departamento de Defensa de los EEUU a través del Institute for Defense Analysis (IDA). Como Analista del Grupo asume la dirección del área de Terrorismo Yihadista Salafista.


Notas
[1]“Drogue. La BNPJ met la main à la pâte” La Gazette du Maroc nº 608, 23 a 29 enero 2009, p. 8 y “69 militares y 2 abogados detenidos por supuesta implicación con narcos” El Faro de Ceuta 30 enero 2009, p. 36.
[2]“Trafic de drogue. Le feuilleton continue” Le Journal Hebdomadaire 31 enero a 6 febrero 2009, p. 8.
[3]“Militares y gendarmes procesados por tráfico de drogas en Marruecos” El Faro de Ceuta 27 enero 2009, p. 59.
[4]Véase CHIMIROU, Y.: “Les 10 jours qui ont changé la lutte anti-drogue au Maroc” La Gazette du Maroc nº 608, 23-29 enero 2009, pp. 26-29.
[5]Haciéndose eco de algunos medios de comunicación españoles en Marruecos se ha destacado que la Guardia Civil interviniera hasta 600 kilogramos de hachís en el susodicho islote. Véase “L´îlot leila. Une île au coeur des intérêts” La Gazette du Maroc nº 608, 23 a 29 de enero 2009, p. 28. Sobre las operaciones véase HAJJAJ, Bachir: “Lutte anti-drogue. Treize nouvelles personnes déférées devant le juge d’instruction” Aujourd’hui Le Maroc nº 1850, 30 enero a 1 febrero 2009, p. 4. Sobre la sensibilidad ligada a la reaparición del islote de Perejil en el debate actual véase “España vigila que los marroquíes no rompan el ‘status quo’ del Perejil” El Pueblo de Ceuta 26 enero 2009, pp. 1 y 2.
[6]Véanse en este sentido dos “inventarios” que pretenden demostrar el papel de España en este incremento, como si Marruecos fuera víctima de una conspiración extranjera y no el productor que es. Véanse “Spanish connections. Retour sur les violations de l’espace aérien par les narcotraficants espagnols” y “Trafic de drogue. Les espagnols aussi” La Gazette du Maroc nº 608, 23 a 29 enero 2009, pp. 28 y 29. También y en el mismo número del semanario véase el artículo de Kamal LAHLOU: “Non à la duplicité” (p. 3).
[7]“Militares y gendarmes procesados op cit.
[8]Sobre el encarcelamiento de Izzou y la destitución de su protector, el General Hamidou Laanigri, hasta entonces al frente de la Dirección de Seguridad del Territorio (DST), véase CEMBRERO, Ignacio: “Purga en palacio” El País 24 septiembre 2006, p. 11.
[9]“La Gendarmería Real se incauta de unas cuatro toneladas de hachís en la región de Kenitra” El Faro de Ceuta 28 enero 2009, p. 36.
[10]Véanse ECHARRI, C.: “Un detenido en Ceuta como parte de una red dedicada al narcotráfico” El Faro de Ceuta 30 enero 2009, p. 11, y “Desmantelada una red de 25 narcos, uno de ellos detenido en Ceuta, que operaba en el Levante” El Pueblo de Ceuta 30 enero 2009, p. 9.
[11]La decisión para crear el CECLAD-M se publicaba en el Diario Oficial de la Comunidad Europea (DOCE) de 29 de enero. Véanse “Méditerranée: Un Centre de coordination pour la lutte anti-drogue” y “Destruction de sept tonnes de stupéfiants à Kénitra”, ambos en Aujourd’hui Le Maroc nº 1850, 30 enero a 1 febrero 2009, p. 4, y “Stupefiants. Destruction de trois tonnes à Al-Hoceima” Le Matin 31 enero a 1 febrero 2009, p. 7.
[12]Desde el año 2000, y como uno más de entre los muchos cambios introducidos por Mohamed VI tras su subida al trono, cada cuatro años se han venido produciendo relevos visibles entre los responsables tanto de la seguridad como del poder local en todas las regiones del país. Véase “Après les walis, les préfets” Le Journal Hebdomadaire 31 enero a 6 febrero 2009, p. 10.
[13]En esta operación, eran detenidos representantes de un amplio abanico de cargos públicos: 4 caïds o agentes de la autoridad; 1 khalifa, 10 chioukhs y 3 mokkadems, todos ellos auxiliares de los !caïds; 5 miembros de las Fuerzas Auxiliares; 9 miembros de la Gendarmería Real; 6 agentes técnicos de la Prefectura de Casablanca; 3 consejeros comunales; además de 16 especuladores inmobiliarios. Véase “Coup de filet à Lahraouiyine” Le Journal Hebdomadaire 31 enero a 6 febrero 2009, p. 12.
[14]Véase el amplio análisis de la operación realizado por Aziz El YAAKOUBI: “Décryptage. Trafic en eaux troubles” Le Journal Hebdomadaire 24 a 30 enero 2009, pp. 18-23.
[15]Sobre el debate en torno a la droga en Afganistán véanse nuestros dos artículos recientes ECHEVERRÍA JESÚS, C: “La estrategia yihadista en Afganistán” UNISCI Discussion Papers nº 19, enero 2009, pp. 74-85, en y “El lucrativo negocio de la droga en Afganistán” Análisis del GEES nº 313, 20 enero 2009, en . Sobre la iniciativa autóctona en la región del Rif véase “Légalisation. Joint non grata” Le Journal Hebdomadaire 24 a 30 enero 2009, p. 22.
[16]Según la Oficina de Naciones Unidas sobre Droga y Crimen Organizado (UNODC) las cosechas se han reducido a la mitad en Marruecos entre 2003 y 2006 y el Gobierno marroquí hacía públicos parte de sus buenos resultados para 2008 el pasado 30 de diciembre. Véase “Anti-drug fight in Morocco yields tangible results” en . Sobre la reducción de los cultivos - de 134.000 hectáreas en 2003 a 120.500 en 2004, 72.000 en 2005 y 50.000 en 2008 - véanse el Morocco Cannabis Survey-Maroc. Enquête sur le cannabis 2005 publicado en enero de 2007 y accesible en y el World Drug Report 2008 Eslovaquia, UNODC, junio 2008, pp. 99 y siguientes, en .
[17]En este sentido cabe citar cómo las autoridades tratan de frenar la instrumentalización que de este conflicto que despierta tantas pasiones entre los marroquíes hace el PJD. Su Secretario General, Abdelillah Benkirane, ha osado incluso afirmar que su partido había inspirado la decisión real de abrir una cuenta particular para atraer fondos de solidaridad con la población palestina de Gaza. Benkirane ha tenido que desdecirse enviando incluso una carta desmintiendo tal cosa al Primer Ministro, Abbas El Fassi. Véase “Le mea culpa de Benkirane” Le Journal Hebdomadaire 31 enero a 6 febrero 2009, p. 10. Por otro lado, la delegación de médicos, farmaceúticos y enfermeros que acompañaron el 25 de enero el envío de 8 toneladas de medicamentos desde Marruecos a Gaza hubo de rechazar la presencia entre ellos del Comité Médico de Khalid Soufiani porque dicho Comité recibe financiación de organizaciones islamistas marroquíes.
[18]Véanse la entrevista a Abdellah Baha, Secretario General Adjunto del PJD, “Le PJD souhaite renforcer sa présence dans le milieu rural” Aujourd’hui le Maroc nº 1850, 31 enero-1 febrero 2009, p. 3, y sobre las elecciones de septiembre de 2007 ECHEVERRÍA JESÚS, C.: “El islamismo en Marruecos tras las elecciones legislativas del 7 de septiembre” Análisis del GEES nº 216, 12 septiembre 2007, en .
[19]“Partis. Les melheurs du PJD” Le Journal Hebdomadaire 31 enero a 6 febrero 2009, p. 12.
[20]Entonces se activaban las alarmas en la zona meridional del país lindando con el territorio del Sáhara Occidental y se intensificaba la cooperación policial con Mauritania ante el riesgo de infiltración de terroristas de Al Qaida en las Tierras del Magreb Islámico (AQMI) en el territorio de ambos Estados. Véase ECHEVERRÍA JESÚS, C.: “Riesgos y amenazas en el Sahel (1ª parte)” War Heat Internacional nº 73, II/2009, p. 43.
[21]Aprovechando nuestra fijación por el tráfico de drogas y habiendo citado la gran operación policial contra dichas redes que en el verano de 2006 afectó a altos cargos de la seguridad cabe recordar que en julio de ese año era destituido, junto con el General Laanigri, Mohamed Belbachir, hasta entonces jefe de la Dirección General de Estudios y de Documentación (DGED), los servicios de inteligencia, a raíz del desmantelamiento de una red yihadista en la que estaban involucrados 5 militares y 3 gendarmes. Véase CEMBRERO, I.: “Purga en palacio op cit.
[22]Sobre la reunión del Consejo en Rabat véanse “Ulemas marroquíes en Europa, en contra del extremismo” El Faro de Ceuta 27 enero 2009, p. 60 y “Conseil marocain des oulémas en Europe: Feuille de route” L’Observateur (Marruecos) 30 enero a 5 febrero 2009, p. 53.
[23]“Los presos islamistas reconocen monarquía y abandonan la violencia” El Faro de Ceuta 28 enero 2009, p. 37.

Hollywood's new censors


In his latest column for the New Statesman, John Pilger describes how censorship in Hollywood works in the age of the 'war on terror'. Unlike the crude days of the cold war, it's by omission and 'introspective dross'.

When I returned from the war in Vietnam, I wrote a film script as an antidote to the myth that the war had been an ill-fated noble cause. The producer David Puttnam took the draft to Hollywood and offered it to the major studios, whose responses were favourable – well, almost. Each issued a report card in which the final category, “politics”, included comments such as: “This is real, but are the American people ready for it? Maybe they’ll never be.”

By the late 1970s, Hollywood judged Americans ready for a different kind of Vietnam movie. The first was The Deer Hunter which, according to Time, “articulates the new patriotism”. The film celebrated immigrant America, with Robert de Niro as a working class hero (“liberal by instinct”) and the Vietnamese as sub-human Oriental barbarians and idiots, or “gooks”. The dramatic peak was reached during recurring orgiastic scenes in which GIs were forced to play Russian roulette by their Vietnamese captors. This was made up by the director Michael Cimino, who also made up a story that he had served in Vietnam. “I have this insane feeling that I was there,” he said. “Somehow... the line between reality and fiction has become blurred.”

The Deer Hunter was regarded virtually as documentary by ecstatic critics. “The film that could purge a nation’s guilt!” said the Daily Mail. President Jimmy Carter was reportedly moved by its “genuine American message”. Catharsis was at hand. The Vietnam movies became a revisionist popular history of the great crime in Indo-China. That more than four million people had died terribly and unnecessarily and their homeland poisoned to a wasteland was not the concern of these films. Rather, Vietnam was an “American tragedy”, in which the invader was to be pitied in a blend of false bravado-and-angst: sometimes crude (the Rambo films) and sometimes subtle (Oliver Stone’s Platoon). What mattered was the strength of the purgative.

None of this, of course, was new; it was how Hollywood created the myth of the Wild West, which was harmless enough unless you happened to be a native-American; and how the Second World War has been relentlessly glorified, which may be harmless enough unless you happen to be one of countless innocent human beings, from Serbia to Iraq, whose deaths or dispossession are justified by moralising references to 1939-45. Hollywood’s gooks, its Untermenschen, are essential to this crusade - the dispatched Somalis in Ridley Scott’s Black Hawk Down and the sinister Arabs in movies like Rendition, in which the torturing CIA is absolved by Jake Gyllenhal’s good egg. As Robbie Graham and Mark Alford pointed out in their New Statesman enquiry into corporate control of the cinema (2 February), in 167 minutes of Steven Spielberg’s Munich, the Palestinian cause is restricted to just two and a half minutes. “Far from being an ‘even-handed cry for peace’, as one critic claimed,” they wrote, “Munich is more easily interpreted as a corporate-backed endorsement of Israeli policy.”

With honourable exceptions, film critics rarely question this and identify the true power behind the screen. Obsessed with celebrity actors and vacuous narratives, they are the cinema’s lobby correspondents, its dutiful press corps. Emitting safe snipes and sneers, they promote a deeply political system that dominates most of what we pay to see, knowing not what we are denied. Brian de Palma’s 2007 film Redacted shows an Iraq the media does not report. He depicts the homicides and gang-rapes that are never prosecuted and are the essence of any colonial conquest. In the New York Village Voice, the critic Anthony Kaufman, in abusing the “divisive” De Palma for his “perverse tales of voyeurism and violence”, did his best to taint the film as a kind of heresy and to bury it.

In this way, the “war on terror” – the conquest and subversion of resource rich regions of the world, whose ramifications and oppressions touch all our lives – is almost excluded from the popular cinema. Michael Moore’s outstanding Fahrenheit 911 was a freak; the notoriety of its distribution ban by the Walt Disney Company helped to force its way into cinemas. My own 2007 film The War on Democracy, which inverted the “war on terror” in Latin America, was distributed in Britain, Australia and other countries but not in the United States. “You will need to make structural and political changes,” said a major New York distributor. “Maybe get a star like Sean Penn to host it – he likes liberal causes - and tame those anti-Bush sequences.”

During the cold war, Hollywood’s state propaganda was unabashed. The classic 1957 dance movie, Silk Stockings, was an anti-Soviet diatribe interrupted by the fabulous footwork of Cyd Charisse and Fred Astaire. These days, there are two types of censorship. The first is censorship by introspective dross. Betraying its long tradition of producing gems, escapist Hollywood is consumed by the corporate formula: just make ‘em long and asinine and hope the hype will pay off. Ricky Gervais is his clever comic self in Ghost Town, while around him stale, formulaic characters sentimentalise the humour to death.

These are extraordinary times. Vicious colonial wars and political, economic and environmental corruption cry out for a place on the big screen. Yet, try to name one recent film that has dealt with these, honestly and powerfully, let alone satirically. Censorship by omission is virulent. We need another Wall Street, another Last Hurrah, another Dr. Strangelove. The partisans who tunnel out of their prison in Gaza, bringing in food, clothes, medicines and weapons with which to defend themselves, are no less heroic than the celluloid-honoured POWs and partisans of the 1940s. They and the rest of us deserve the respect of the greatest popular medium.

domingo, 15 de fevereiro de 2009

Informe del Parlamento Europeo sobre el Sahara Occidental: un fiasco anunciado


Entre el 25 y el 29 de enero una delegación del Parlamento Europeo visitó Marruecos y el Sahara Occidental. Se espera que se publique un informe sobre esta visita. Pero las declaraciones de Carlos Iturgaiz, miembro de la misma, parecen indicar que este informe será complaciente con la potencia ocupante.

En una entrevista publicada por la página web del Parlamento Europeo el eurodiputado español Carlos Iturgaiz, hace unas declaraciones sorprendentes sobre su visita al Sahara y que no auguran nada bueno.

De entrada, parece conveniente decir que Iturgaiz es un protegido político de Jaime Mayor Oreja, discreto miembro del lobby pro-marroquí en España y también padrino del bien conocido Gustavo de Arístegui.

Analicemos las palabras del sr. Iturgaiz y contrastémoslas con la realidad.

1.
Dice Iturgaiz

el gobierno marroquí nos ha dado todas las facilidades para poder hacer toda clase de entrevistas allí (en el territorio ocupado del Sahara Occidental).

La realidad.
Según dice Amnistía Internacional

Defensores de los derechos humanos saharauis acosados durante la visita del Parlamento Europeo

2.
Dice Iturgaiz

Antes, otros parlamentarios y grupos políticos habían intentado acceder a El Aaiún y no tuvieron el visto bueno. Por lo tanto, esta visita denota que las cosas están cambiando en Marruecos.

La realidad
El Sahara Occidental ha sido visitado antes por misiones de Naciones Unidas y de Human Rights Watch (HRW). Mientras que en la visita de HRW los defensores de los derechos humanos no fueron acosados por Marruecos, esta vez sí lo han sido.
HRW acaba de decir el 19 de diciembre:
Tanto el Gobierno de Marruecos como el Frente Polisiario recibieron a la delegación de Human Rights Watch, no interpusieron ningún obstáculo significativo a su trabajo y ofrecieron respuestas extensas

Efectivamente, las cosas están cambiando pero ¿a mejor?

3.
Dice Iturgaiz

Creo que es una verdad innegable que va habiendo una evolución política y modernización en Marruecos

La realidad
El semanario crítico marroquí Le Journal en su edición de 24 de enero (que pudo leer el sr. Iturgaiz en su estancia en Marruecos) confirma que Marruecos sigue siendo una Monarquía absoluta. En Estrasburgo, el Sr. Iturgaiz también habría podido leer el diario Le Monde en su edición de 27 de noviembre, que revela la frustración del pueblo marroquí al ver cómo la "revolucionaria" reforma del código de familia existe sólo sobre el papel.

4.
Dice Iturgaiz

Tenemos muchísimos temas en común con este país, como inmigración, terrorismo, pesca (...)

La realidad
Dice el anterior Vicesecretario General de Asuntos Legales y Asesor Legal de las Naciones Unidas, el Embajador Hans Corell:

Se me ha sugerido que la Comisión Europea ha invocado la opinión legal que ofrecí en 2002 en apoyo del Acuerdo de Asociación de Pesca. Ignoro si es verdad, pero si lo es, me resulta incomprensible que la Comisión pudiera hallar tal apoyo en la opinión legal, a no ser, por supuesto, que la Comisión hubiera comprobado que se había consultado a las personas del Sáhara Occidental, que éstas hubieran aceptado el acuerdo y el modo en el que iban a resultarles de beneficio los rendimientos de la actividad. No obstante, un examen del Acuerdo resulta, de hecho, en una conclusión diferente.

5.
Dice Iturgaiz

En este viaje al Sáhara, la delegación del Magreb y a la delegación ad hoc del Parlamento Europeo para el Sáhara nos hemos centrado en el tema de los derechos humanos, era el objetivo
(...)
todos dicen lo mismo: que por encima del estatuto de autonomía, de la autodeterminación o de la independencia, lo más importante es poder reagrupar a las familias saharauis, que se vuelvan a reunificar

La realidad
Podrá alguien haberle dicho eso, como le pueden haber dicho "misa". La realidad es que dice el informe del Alto Comisariado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos de 8 de septiembre de 2006:

Como se ha establecido en varios foros de la ONU, el derecho a la autodeterminación del pueblo del Sáhara Occidental, debe asegurarse e implementarse sin mayor retraso. Como subrayamos arriba, la delegación concluye que casi todas las violaciones de los derechos humanos al pueblo del Sáhara Occidental, bajo la autoridad de facto del Gobierno de Marruecos o del Frente Polisiario, provienen de la no implementación de este derecho humano fundamental

No conozco el contenido del informe del Parlamento Europeo sobre el Sahara Occidental. Pero las declaraciones de Iturgaiz no auguran nada nuevo.
Si es así, para esto, mejor habría sido quedarse en casa.

sexta-feira, 13 de fevereiro de 2009

¿Hay complicidad de El Mundo con el majzén?


Hace tiempo me hice eco de que el diario marroquí Le Soir informaba de un supuesto pacto entre el diario El Mundo y el régimen alauita se había llegado a un acuerdo por mediación de Gustavo de Arístegui. Un grave hecho reciente aumenta las sospechas de que eso sea cierto.

Aquí reproduje la información según la cual el diario El Mundo pactaba con el poder marroquí con Gustavo de Arístegui como mediador.

Hoy en El País se informa de que

Rabat veta a dos opositores en el festival 'La mar de músicas' de Cartagena
La coordinadora del evento dimite tras el veto marroquí a la islamista Nadia Yassin y al periodista Alí Lmrabet

Las preguntas son:
- ¿cómo es posible que el diario El Mundo, donde Gustavo de Arístegui colabora con más asiduidad que antes (si cabe) no haya informado de ello?
- ¿sigue siendo Ali Lmrabet periodista de El Mundo? Si no lo es, ¿por qué ha dejado de serlo?

quarta-feira, 11 de fevereiro de 2009

Sara Ocidental: O risco de guerra com Marrocos está «bem presente»


Tifariti – Mohamed Abdelaziz, secretário-geral da Frente Polisário e presidente da Republica Árabe Saraui Democrática (RASD) declarou à PNN que o reinício da guerra com Marrocos «é um risco bem presente».
«Esta situação nem de guerra nem de paz começa a ser insuportável» afirmou à PNN um militar da Frente Polisário que participou nas guerras da década de 70 e 80. «Dêem-nos armas que vamos chegar até Rabat (capital de Marrocos)» disse enervado um jovem da Polisário que nunca conheceu a costa Atlântica do Sara Ocidental ocupado por Marrocos.

Depois de 17 anos de tréguas, que deveria para permitir à ONU de preparar um referendo neste território maioritariamente desértico, após o fracasso de quatro «rounds» de negociações directas entre a Polisário e Marrocos com a mediação das Nações Unidas, o clima de tensão dispara junto dos sarauis instalados nos campos de refugiados no triângulo fronteiriço argelino de Tindouf. Os jovens querem «regressar às armas», os veteranos ainda acreditam na diplomacia mas compreendem a posição da juventude.

Quando se pretende consolidar a União do Magrebe Árabe (UMA) e criar alicerces para a União pelo Mediterrâneo (UPM), o espectro do retorno à guerra nesta zona ocidental do Magrebe começa a atingir o cume da tensão com um cenário de abrasamento na encruzilhada das fronteiras do Sara Ocidental, Marrocos, Mauritânia e Argélia.

«A paciência tem limites» afirmou Mohamed Abdelaziz à PNN: «O retomar das hostilidades é um risco bem presente. É uma opção que pretendemos evitar, mas confirmo que o regresso à guerra é uma opção real e para a qual nós estamos a preparar, caso sejamos obrigados no quadro de uma politica de defesa legitima» disse reconhecendo que a Polisário manifestou à ONU ainda estar disposta a negociar com Marrocos, todavia Ban Ki Moon, secretario geral das Nações Unidas, «ainda não designou os mediadores nem disse o que vai fazer», além da data do V round das negociações permanecer ainda uma incógnita.

Para Mohamed Abdelaziz existem contudo sinais de esforços da comunidade internacional e realçou que o Parlamento Europeu «mencionou a necessidade de resolver o problema do Sara Ocidental assente no respeito do direito internacional e do povo do saraui, e alertou também o presidente francês, Nicolas Sarkozy, que a UPM deve ter em consideração a existência deste problema próximo do Mediterrâneo. Espero que o problema do Sara Ocidental seja resolvido antes da criação da UPM» sublinhou o secretário-geral da Frente Polisário.

POVOAR O DESERTO

Após 17 anos de tréguas e cessar-fogo a Frente Polisário decidiu, durante o congresso de Dezembro de 2007, desenvolver a chamadas «zonas libertadas» que permaneceram também num impasse de desenvolvimento devido ao receio de eventuais bombardeamentos e ataques das forças marroquinas. «O congresso decidiu de construir nas zonas livres do Sara Ocidental enquanto espera pela solução final do problema» confirmou Mohamed Abdelaziz à PNN. «Tifariti é uma localidade que se encontra nos territórios livres do Sara Ocidental. Além de Tifariti, as localidades de Bir Lahlo, Mehairiz, Bir Tiblissit, Mijek, Agghouinit, Dougue e Zoug» estão também abrangidas pelo programa de desenvolvimento.

«Hoje existem, de uma forma geral, nómadas em toda a região que estão ligados a estas localidades onde se abastecem de água, carburantes, bens e tratamentos, dado que já aí existem hospitais e dispensários», explicou o secretário-geral da Polisário: «estamos a elaborar um projecto desenvolvimento desta região, onde, Tifariti é o ponto mais interessante e a prioridade dado que geograficamente é uma localidade que tem muitas condições favoráveis além de ser um ponto estratégico. Tifariti já dispõe de um hospital, escola, estão em curso a construção de habitações, colocamos a primeira pedra para a construção de uma mesquita, um parlamento, uma barragem, um estádio e pensamos na construção de um aeroporto».

PORTUGAL COMO EXEMPLO

A acção portuguesa pela independência de Timor-Leste é sempre citada pela Frente Polisário como o exemplo que a Espanha (antiga potencia colonial no Sara Ocidental) deveria seguir. «Portugal é um país do sul da Europa que tem relações com a nossa região, quer dizer com o Magrebe, é um país que tem uma boa experiencia da descolonização, principalmente o caso de Timor Oriental, daí espero que Portugal tenha um papel semelhante no Sara Ocidental como teve em Timor» considerou Mohamed Abdelaziz, prosseguindo: «é um país interessante, influente na Europa e no quadro nas Nações Unidas, assim convido Portugal a defender o referendo livre no Sara Ocidental que permita a descolonização do nosso país, para que possamos, nós e a Europa, principalmente a Espanha e Portugal, nos lançarmos numa cooperação mais rentável para todos nós.»

Mohamed Abdelaziz lamentou que Portugal assinasse o acordo de pescas nos territórios marítimos do sara ocidental e considera que Lisboa foi «influenciada por países da UE na assinatura do «acordo ilegal de pescas entre a UE e o Governo de Marrocos, onde encontramos Portugal ao lado da França e da Espanha» acusou o secretario geral da Frente Polisário.

Sara Ocidental: Um Estado à espera de ser Estado


Rabuni – Enquanto aguardam que a ONU exija a aplicação do referendo no Sara Ocidental, todas as estruturas de um Estado independente já funcionam nos campos de refugiados sarauis instalados numa zona desértica do sudoeste argelino.
Um dos melhores argumentos que a Frente Polisário constituiu perante a comunidade internacional para sustentar que está pronta a assumir as rédeas do Sara Ocidental assenta na criação de todas as estruturas de um Estado independente na vasta região próximo de Tinduf, sudoeste argelino, onde vivem cerca de 125 mil refugiados da antiga colónia espanhola. Em 1975 Madrid decidiu abdicar do seu domínio colonial sariano deixando o território à mercê de Marrocos e da Mauritânia que tiveram de fazer face à resistência armada saraui da Frente Polisário, uma história semelhante à ocupação indonésia em Timor.

Um ano após a retirada espanhola a Frente Polisário proclama, a 27 de Fevereiro, na pequena localidade de Bir Lahlo, um oásis situado nos territórios desertos do Sara Ocidental controlados pelo movimento, a independência da RASD (República Árabe Saraui Democrática), onde a omnipresença do movimento de libertação saraui está patente em todas as suas estruturas.

Em poucos anos a RASD tornou-se a arma diplomática mais potente da Polisário. É um Estado semi virtual que conseguiu obter o reconhecimento real como um Estado de direito no seio da Organização da Unidade Africana (OUA), actual União Africana (UA), permitindo-lhe assim a abertura de embaixadas em todos os países que reconheceram a sua legitimidade. Uma gigantesca vitória diplomática da Polisário que precipitou a retirada de Marrocos da OUA. Nos países, como Portugal, que não reconhecem o Estado saraui a Polisário abriu «representações» que funcionam como consulados.

A RASD desenvolve-se nos acampamentos de refugiados na Argélia como um Estado no exílio desde há 33 anos. Teoricamente deveria estar instalada nos territórios controlados pela Polisário, que representam cerca de 30 por cento do Sara Ocidental. Mas, nesta faixa desértica que acompanha a linha de «choque» com os territórios controlados por Marrocos, onde Rabat construiu o maior muro «defensivo» do planeta, vivem apenas cerca de 20 mil sarauis maioritariamente nómadas. Perante as críticas marroquinas que acusavam a Polisário de deixar ao abandono os territórios que controla, o movimento saraui decidiu desenvolver e repovoar esta região, dotando-a de estruturas administrativas fixas e de condições para a sedentarização da população. No entanto, a presença da Polisário permanece essencialmente militar e esta alega que não quer usar a sua população como escudo humano face às tropas marroquinas.

Partindo de Tinduf em direcção aos acampamentos, Rabuni é uma passagem obrigatória. É a «capital» administrativa dos acampamentos e onde se concentra todo aparelho de «Estado». Presidência, Governo, Ministérios dos Negócios Estrangeiros, Defesa, Cooperação, Justiça, Interior, Territórios Ocupados, Saúde e Cultura garantem a gestão dos campos, gerem a ajuda humanitária e elaboram as estratégias diplomáticas a seguir pela Polisário.

Para manter vivo o passado, foram atribuídos aos acampamentos de refugiados os nomes das cidades e localidades do Sara Ocidental controlado por Marrocos, como Layoune, Smara, Awserd ou Dakhla que assumem a designação de «wilayas», ou seja, distritos. Estas são subdivididas em «dairas» (freguesias) que congregam vários bairros que adoptaram também os nomes daqueles que estão nos denominados «territórios ocupados».

Cada «daira» dispõe de um dispensário que depende de um hospital assistido por médicos sarauis, maioritariamente formados em Cuba, que contam com o apoio permanente das representações espanhola e grega da ONG Médicos do Mundo.

Enquanto o sistema de saúde saraui tem conseguido evitar a propagação de epidemias nos campos, os refugiados sarauis são hoje vítimas de reduções drásticas da ajuda alimentar, da qual depende totalmente, consequência das «campanhas de intoxicação marroquinas» que acusam a Polisário de revender as ajuda humanitária na Mauritânia, explicou Salek Baba Hassena, Ministro da Cooperação.

Os sarauis são muçulmanos e encaram a prática religiosa como uma opção individual de cada fiel, rejeitando qualquer forma de integrismo ou fundamentalismo religioso. Esta atitude de tolerância religiosa justifica, segundo dirigentes da Polisário, a retracção no apoio à causa saraui de vários países árabes que preferem alinhar a sua posição por Rabat que decidiu ceder terreno politico aos islamistas como forma de combate ao integrismo.

As mulheres têm um papel vital na organização e gestão dos campos de refugiados, contrariando o hábito da maioria dos países árabes. Além de serem dominantes nos cursos de formação profissional nos acampamentos a presença feminina é também maioritária nos conselhos regionais das «wilayas» e «dairas».

Com o apoio de várias ONG e associações de solidariedade com a questão saraui, são realizados vários eventos invulgares em campos de refugiados como o festival internacional do cinema no Sara Ocidental, a Maratona do Sara, que terá lugar no final de Fevereiro e o festival de «Art Tifariti» que agrupa centenas de participantes de todo mundo. Todos os acampamentos recebem a Rádio Saraui, que dispõe de delegações em cada «wilaya», e em Rabuni já estão instalados os estúdios do futuro canal de televisão saraui, RASD-TV, que pretende ser difundido por satélite para 43 países.

Durante 34 anos de tortuoso exílio os refugiados sarauis souberam transformar o desgaste e a paciência em arma política e diplomática desenvolvendo o primeiro Estado independente virtual com um funcionamento real.

Sara Ocidental: A intifada esquecida


Rabuni – Todos os portugueses conhecem a intifada palestiniana mas a maioria desconhece que no segundo país mais próximo de Portugal, Marrocos, está em curso outra intifada reprimida com extrema violência pelo reino alauita.
«São vocês que têm de explicar porque é que a maior parte dos órgãos de comunicação social não falam na intifada saraui em Marrocos» reage Khalil Sidi M’Hamed, Ministro dos Territórios Ocupados e da Diáspora da República Árabe Saraui Democrática (RASD) quando questionado sobre o silêncio da imprensa internacional face à intifada saraui.

Desencadeada em Maio 2005 por estudantes sarauis da universidade de Rabat, a intifada tornou-se num quebra-cabeças para a monarquia marroquina que tenta abafar a existência de um levantamento saraui nos territórios do Sara Ocidental controlado por Marrocos mas já se estende a todo o país. Uma situação que não passou despercebida à delegação ad hoc do Parlamento Europeu que se deslocou no final de Janeiro a Layoune, como constatou a Amnistia Internacional.

Depois de ter defendido que a Frente Polisário era um movimento terrorista Rabat não hesita em reprimir com extrema violência qualquer manifestação pela autodeterminação do Sara Ocidental, e longe das paradisíacas fotografias turísticas Marrocos vai superlotando as suas prisões (foto) com amontoados de manifestantes acusados de serem perigosos destabilizadores do reino.

Uma concentração de jovens sarauis, a aclamação de um slogan pela autodeterminação ou desenhar clandestinamente uma bandeira da RASD resulta imediatamente numa reacção das forças de segurança marroquinas que multiplicam as detenções arbitrarias e submetem os «revoltosos» a múltiplas torturas frequentemente denunciadas pelas ONG’s internacionais.

As manifestações pacíficas transformaram-se entretanto em acções de resistência, e qualquer sinal de repressão degenera rapidamente numa chuva de pedras contra a polícia de choque marroquina. Imagens que Rabat tenta ocultar mas a Polisário, e os manifestantes sarauis, difundem através da YouTube e Dailymotion.

Qualificando de «guerrilha pacífica» Khalil Sidi M’Hamed afirma que a intifada saraui faz parte da «causa do povo» e da luta da Frente Polisário, «cada indivíduo que está nos campos de refugiados sarauis (na Argélia) tem um electrão na intifada» sublinha. Segundo o Ministro dos Territórios Ocupados e da Diáspora da RASD a acção da intifada provocou que Marrocos impedisse que ONG’s de defesa dos Direitos Humanos se deslocassem ao Sara Ocidental, onde Rabat tenta ocultar «valas comuns com vítimas sarauis».

Para Khalil Sidi M’Hamed a Intifada saraui «é como a Revolução Laranja (Ucrânia)», onde participam todas as camadas sociais, e garante que vai continuar a dilatar e alastrar por todo o território marroquino porque «quando um país está sob ocupação todos tornam-se resistentes».

Marrocos apenas reconhece cinco vítimas mortais da intifada, e a Polisário avança que desde 2005 a acção das forças de segurança marroquinas contra a «guerrilha pacífica» resultou em «centenas de vítimas», entre os mortos, feridos e torturados.

No último relatório da Human Rights Watch foi assinalado que os militantes sarauis e os defensores dos direitos humanos continuam a ser vítimas de «perseguições e assédio perpetrado pelas autoridades marroquinas que tentam desacreditar estes militantes acusando vários de utilizarem os direitos humanos com o pretexto para apoiarem “acções separatistas” da Polisário, por vezes com violência». Segundo a mesma ONG para os manifestantes sarauis a recusa marroquina do direito à autodeterminação é uma violação dos direitos humanos.

Face às pressões internacionais Marrocos foi forçado a levantar a pressão sobre as populações do Sara Ocidental e permitir a circulação dos activistas dos direitos humanos sarauis, os quais acabaram por se tornar nos símbolos da intifada e nos principais embaixadores das denúncias de violações dos direitos humanos praticadas nestes territórios. Foi este quadro que permitiu a Aminatu Haidar, sobrevivente das prisões e torturas marroquinas, se tornar na porta-voz itinerante das populações sarauis nos territórios do Sara Ocidental controlado por Marrocos e recentemente recebeu em Washington o prémio de defensora dos direitos humanos atribuído pelo Centro Robert F. Kennedy.

O bloqueio mediático à Intifada no Sara Ocidental prossegue dado que Marrocos não quer ver manchada a sua proposta de autonomia para o território o qual a Frente Polisário rejeita. Perante o impasse de um cessar-fogo que dura há quase duas décadas, dos fiascos acumulados das negociações entre Rabat e a Polisário sob os auspícios da ONU, e face à indiferença internacional relativamente ao «levantamento saraui» a intifada pode disparar e «tudo é possível acontecer a curto prazo», reconheceu Khalil Sidi M’Hamed.

domingo, 8 de fevereiro de 2009

The politics of bollocks


In his latest column for the New Statesman, John Pilger borrows from Lord West of Spithead to deconstruct current mythology, such as the 'impartiality' of the BBC and the 'radical changes' implemented by President Obama.

Growing up in an Antipodean society proud of its rich variety of expletives, I never heard the word bollocks. It was only on arrival in England that I understood its majesterial power. All classes used it. Judges grunted it; an editor of the Daily Mirror used it as noun, adjective and verb. Certainly, the resonance of a double vowel saw off its closest American contender. It had authority.

A high official with the Gilbertian title of Lord West of Spithead used it to great effect on 27 January. The former admiral, who is security adviser to Gordon Brown, was referring to Tony Blair’s famous assertion that invading countries and killing innocent people did not increase the threat of terrorism at home.

“That was clearly bollocks,” said his lordship, who warned of the perceived “linkage between the US, Israel and the UK” in the horrors inflicted on Gaza and the effect on the recruitment of terrorists in Britain. In other words, he was stating the obvious: that state terrorism begets individual or group terrorism at source. Just as Blair was the prime mover of the London bombings of 7 July 2005, so Brown, having pursued the same cynical crusades in Muslim countries and having armed and disported himself before the criminal regime in Tel Aviv, will share responsibility for related atrocities at home.

There is a lot of bollocks about at the moment.

The BBC’s explanation for banning an appeal on behalf of the stricken people of Gaza is a vivid example. Mark Thompson, the director general, cited the BBC’s legal requirement to be “impartial... because Gaza is a major ongoing news story in which humanitarian issues... are both at the heart of the story and contentious.”

In a letter to Thompson, David Bracewell, illuminated the deceit behind this. He pointed to previous BBC appeals for the Disasters Emergency Committee that were not only made in the midst of “an ongoing news story” in which humanitarian issues were “contentious”, but demonstrated how the BBC took sides. In 1999, at the height of the illegal Nato bombing of Serbia and Kosovo, the TV presenter Jill Dando made an appeal on behalf of Kosovar refugees. The BBC web page for that appeal was linked to numerous articles meant to support the gravity of the humanitarian issue. These included quotations from Blair himself, such as “This will be a daily pounding until [Slobodan Milosevic] comes into line with the terms that Nato has laid down.” There was no significant balance of view from the Yugoslav side, and not a single mention that the flight of Kosovar refugees began only after Nato had started bombing. Similarly, in an appeal for the victims of the civil war in the Congo, the BBC favoured the regime of Joseph Kabila without referring to the Amnesty, Human Rights Watch and other reports accusing his forces of atrocities. In contrast, the rebel leader Nkunda was “accused of committing atrocities” and was ordained the BBC’s bad guy. Kabila, who represented western interests, was clearly the good guy – just like Nato in the Balkans and Israel in the Middle East.

While Mark Thompson and his satraps richly deserve the Lord West of Spithead Bollocks Blue Ribbon, that honour goes to the cheer squad of President Barack Obama, whose cult-like obeisance goes on and on.

On 23 January, the Guardian’s front page declared, “Obama shuts network of CIA ‘ghost prisons’ ”. The “wholesale deconstruction [sic] of George Bush’s war on terror”, said the report, had been ordered by the new president who would be “shutting down the CIA’s secret prison network, banning torture and rendition...”.

The bollocks quotient on this was so high that it read like the press release it was, citing “officials briefing reporters at the White House yesterday”. Obama’s orders, according to a group of 16 retired generals and admirals who attended a presidential signing ceremony, “would restore America’s moral standing in the world”. What moral standing? It never ceases to astonish that experienced reporters can transmit PR stunts like this, bearing in mind the moving belt of lies from the same source under only nominally different management.

Far from “deconstructing [sic] the war on terror”, Obama is clearly pursuing it with the same vigour, ideological backing and deception as the previous administration. George W. Bush’s first war, in Afghanistan, and last war, in Pakistan, are now Obama’s wars – with thousands more US troops to be deployed, more bombing and more slaughter of civilians. On 22 January, the day he described Afghanistan and Pakistan as “the central front in our enduring struggle against terrorism and extremism”, 22 Afghan civilians died beneath Obama’s bombs in a hamlet populated mainly by shepherds and which, by all accounts, had not laid eyes on the Taliban. Women and children were among the dead, which is normal.

Far from “shutting down the CIA’s secret prison network”, Obama’s executive orders actually give the CIA authority to carry out renditions, abductions and transfers of prisoners in secret without the threat of legal obstruction. As the Los Angeles Times disclosed, “current and former intelligence officials said the rendition program might be poised to play an expanded role.” A semantic sleight of hand is that “long term prisons” are changed to “short term prisons”; and while Americans are now banned from directly torturing people, foreigners working for the US are not. This means that America’s numerous “covert actions” will operate as they did under previous presidents, with proxy regimes, such as Augusto Pinochet’s in Chile, doing the dirtiest work.

Bush’s open support for torture, and Donald Rumsfeld’s extraordinary personal overseeing of certain torture techniques, upset many in America’s “secret army” of subversive military and intelligence operators as it exposed how the system worked. Obama’s nominee for director of national intelligence, Admiral Dennis Blair, has said the Army Field Manual may include new forms of “harsh interrogation”, which will be kept secret.

Obama has chosen not to stop any of this. Neither do his ballyhooed executive orders put an end to Bush’s assault on constitutional and international law. He has retained Bush’s “right” to imprison anyone, without trial or charges. No “ghost prisoners” are being released or are due to be tried before a civilian court. His nominee for attorney-general, Eric Holder, has endorsed an extension of Bush’s totalitarian USA Patriot Act, which allows federal agents to demand Americans’ library and bookshop records. The man of “change”, is changing little. That ought to be front page news from Washington.

The Lord West of Spithead Bollocks Prize (Runner-up) is shared. On 28 January, a national Greenpeace advertisement opposing a third runway at London’s Heathrow airport summed up the almost willful naivety that has obstructed informed analysis of the Obama administration. “Fortunately,” declared Greenpeace beneath a God-like picture of Obama, “the White House has a new occupant, and he has asked us all to roll back the spectre of a warming planet.” This was followed by Obama’s rhetorical flourish about “putting off unpleasant decisions”. In fact, Obama has made no commitment to curtail the America’s infamous responsibility for the causes of global warming. As with Bush and most modern era presidents, it is oil, not stemming carbon emissions, that informs the new administration. Obama’s national security adviser, General Jim Jones, a former Nato supreme commander, made his name planning US military control over the exploitation of oil and gas reserves from the Persian Gulf and the Caspian Sea to the Gulf of Guinea in Africa.

Sharing the Bollocks Runner-up Prize is the Observer, which on 25 January published a major news report headlined, “How Obama set the tone for a new US revolution”. This was reminiscent of the Observer almost a dozen years ago when liberalism’s other great white hope, Tony Blair, came to power. “Goodbye Xenophobia” was the Observer’s post-election front page in 1997 and “The Foreign Office says Hello World, remember us”. The government, said the breathless text, would push for “new worldwide rules on human rights and the environment” and implement “tough new limits” on arms sales. The opposite happened. Last year, Britain was the biggest arms dealer in the world; currently it is second only to the United States.

In the Blair mould, the Obama White House “sprang into action” with its “radical plans”. The new president’s first phone call was to that Palestinian quisling, the unelected and deeply unpopular Mohammed Abbas. There was a “hot pace” and a “new era”, in which a notorious name from an ancien regime, Richard Holbrooke, was dispatched to Pakistan. In 1978, Holbrooke betrayed a promise to normalise relations with the Vietnamese on the eve of a vicious embargo that ruined the lives of countless Vietnamese children. Under Obama, the “sense of a new era abroad”, declared the Observer, “was reinforced by the confirmation of Hillary Clinton as secretary of state”. Clinton has threatened to “entirely obliterate Iran” on behalf of Israel.

What the childish fawning over Obama obscures is the dark power assembled under cover of America’s first “post-racial president”. Apart from the US, the world’s most dangerous state is demonstrably Israel, having recently killed and maimed some 4,000 people in Gaza with impunity. On 10 February, a bellicose Israeli electorate is likely to put Binyamin Netanyahu into power. Netanyahu is a fanatic’s fanatic who has made clear his intention of attacking Iran. In the Wall Street Journal on 24 January, he described Iran as the “terrorist mother base” and justified the murder of civilians in Gaza because “Israel cannot accept an Iranian terror base (Gaza) next to its major cities”. On 31 January, unaware he was being filmed, Israel’s ambassador in Australia described the massacres in Gaza as a “pre-introduction” - dress rehearsal - for an attack on Iran.

For Netanyahu, the reassuring news is that Obama’s administration is the most Zionist in living memory – a truth that has struggled to be told from beneath the soggy layers of Obama-love. Not a single member of Obama’s team demurred from Obama’s support for Israel’s barbaric actions in Gaza. Obama himself likened the safety of his two young daughters with that of Israeli children while making not a single reference to the thousands of Palestinian children killed with American weapons - a violation of both international and US law. He did, however, demand that the people of Gaza be denied “smuggled” small arms with which to defend themselves against the world’s fourth largest military power. And he paid tribute to the Arab dictatorships, such as Egypt, which are bribed by the US Treasury to help the US and Israel enforce policies described by the United Nations Rapporteur, Richard Falk, a Jew, as “genocidal”.

It is time the Obama lovers grew up. It is time those paid to keep the record straight gave us the opportunity to debate informatively. In the 21st century, people power remains a huge and exciting and largely untapped force for change, but it is nothing without truth. “In the time of universal deceit,” wrote George Orwell, “telling the truth is a revolutionary act.”

Touching a nerve: a case study in propaganda


When I set up this blog I didn’t intend it to be so heavy on Western Sahara. However, the more I’ve worked in Western Sahara the more I have been exposed to the politics of the region - in particular the anti-independence, anti-referendum, and especially anti-Polisario propaganda that emanates continuously from Rabat and supporters of Morocco’s occupation. This runs the gamut from laughable through inventive to sometimes offensive, and can be quite sophisticated. Having an over-developed social conscience I sometimes feel compelled to address this propaganda, and expose it where I can (although I really don’t want to end up as an apologist for the Polisario - the issue to me is not the nature of the Polisario, but rather Morocco’s occupation and the issue of self-determination, which would be at the heart of the Western Sahara question whether opposition to Moroccan occupation was led by Polisario or Mickey Mouse). My efforts in this regard are necessarily small, as countering the Moroccan propaganda machine could easily be a full-time job, and not one I’d want, even if someone was paying me (and they’re not, despite rumours to the contrary).

There are plenty of people on the Moroccan side (and the Polisario side - let’s be fair) for whom “information management” is a full-time job. Perhaps foolishly, in terms of time costs, I allowed myself to get drawn into a discussion with someone whom I presume is one of these professionals, over at Global Voices Online. The gentleman in question calls himself Ahmed Salem Amr Khaddad, and he claims to be a “Unionist Sahrawi”. (i.e. in favour of the forced union between Western Sahara and Morocco). I gave him the benefit of the doubt, and we had a long exchange, which eventually fizzled out. He paid me the compliment of commenting on Sand and Dust at long last, under a recent post. Now, when people post on your blog you can see their IP address, so I established that Ahmed Salem, or at least his internet connection, is based in Casablanca, with the IP address registered to the Office National des Postes et Telecommunications (based on plugging the IP address into the free web software at http://www.ip-adress.com/ip_tracer/).

After my last post on the McDonald’s and the UK Foreign and Commonwealth Office’s maps (I wonder if they’re now using the same source, or should that be sauce?), Ahmed Salem underwent a veritable eruption on Global Voices online, which had linked to my ramblings. Apparently I hit some sort of nerve. This is what he wrote:

“The article above comes from the blog of a very well known Polisario supporter under the name of Nick Brooks. His pro-polisario blog is about biases he is far from the situation on the ground. I have already discussed with Nick about his position. He always argues that he is impartial in his blog ?!#2~à@)&°0 !!!!! I told him so why putting just pro-polisarian links on your blog? Why not putting URLs form the unionist sahraouis website as CORCAS and many others supporting unionism in the region of Western Sahara? No way. Nick is not credible at all. He is supposed to conduct some research work in a buffer zone established by the UN in 1991 just after the war held between the moroccan army and the polisario troops supported by Algeria & Lybia. HE IS SPONSORED BY AN ALGERIAN STAKEHOLDER OIL COMPANY ;-) . He is very closed to Polisario troops in the buffer zone.

I believe Nick is among those who would like to maintain the status quo in the Western Sahara issue to keep alive his research work and SPONSORING.

Nick has no lesson to give to the international community about the reality on the ground in Western Sahara. It becomes clear to everyone that Polisario leaders were lying and they are still continuing to lie on Human rights in Western Sahara.”

Of course I replied. In fact I was quite flattered to have generated such a response. Whatever its other impacts, this blog appears to be raising the blood pressure of at least one Moroccan propagandist, and the fact that the practitioners of the Maghrebian dark arts find it necessary to indulge in such slander suggests that they feel my views have some relevance, and that’s gratifying. By the way, he’s right about my not being impartial (but wrong about my claims to be) - as another blog puts it: “truth not balance”

I have to say I’m not sure whether to be amused or disapproving of Ahmed Salem’s accusations, which I suspect are a little hypocritical, given that he’s probably employed to peddle propaganda. Out of interest I googled “Ahmed Salem Amr Khaddad” to see what his web footprint was like - i.e. how busy he is on the web with his propaganda. Not huge, but significant. Maybe this isn’t his full-time job but he’s certainly pretty active, and his arguments are well-rehearsed and often inventive. In any case his arguments provide a good case study of the Moroccan propaganda machine, and anyone interested in what sort of arguments and tactics the Moroccans are using to persuade, cajole and insist would do worse than look at the works of Ahmed Salem Amr Khaddad.

In addition to Global Voices and this blog, he crops up on: Flickr; Magharebia; Wikipedia (as Moroccansahraoui, claiming to be from Laayoune); Palestine Think Tank (under his own name alongside another “Moroccan Sahrawi” using similar language and levelling the same accusations at the author of the article in question as he levels at yours truly: “you looks well paid by the Algerian regime to defend a false cuase, from the bigining and Algeria is spending money to find people like you to spread this kind of lies….the only HYPOCRIT HERE IS YOURSELF“); and Christianne Vienne’s website (she’s a Belgian senator, from what I can see). So he’s certainly busy, pushing the same line - that the majority of Sahrawi want to be Moroccan, that Polisario is a Marxist (or post-Marxist, now Islamic fundamentalist) organisation holding people against their will, that only a small percentage of the people in the camps around Tindouf are Sahrawi, the remainder being economic migrants from the Sahel, and so on, and accusing anyone who disagrees with him of being on the Algerian payroll.

Ahmed Salem likes to point to the CORCAS website a lot. CORCAS is the Royal Advisory Council on Saharan Affairs, appointed by the Moroccan government to give the appearance of a legitimate devolved administration. Their website has lots of articles about how great the Autonomy Plan is and how wicked the Polisario are, and not a few pictures of King Mohamed VI. I couldn’t help but think of the Egyptian Gazette, which I used to glance at in the early 1990s when I was living in Cairo, and which always kicked off with a story about President Mubarak.

Ahmed Salem also likes to argue that Morocco is bringing the benefits of development and modernity to poor primitive, neglected Western Sahara, and points to a number of Moroccan sites boasting about investment in the territory. His Flickr account (westernsaharaoccidental) consists of photos presumably intended to illustrate modernity and abundance in Laayoune and Dakhla, in the Moroccan-controlled areas of Western Sahara (market stalls groaning with fresh produce and aerial shots of modern conurbations). Most of these photos are captioned “Autonomy and more development to face the Globalization”. Of course different kinds of images can be found on sites such as ASVDH, which monitors human rights abuses in the occupied areas.

So, why am I bothering to devote attention to this propaganda merchant? Partly as a sort of right-to-reply after his outburst at me, but also (and more importantly) to cast a spotlight on the Moroccan propaganda machine while it’s in action and allow the few readers of this blog to scrutinize the arguments and tactics that form its backbone. The propaganda of Ahmed Salem and his fellow practitioners follows a number of key principles, which seem to include the following:

1. Steer the debate away from the issue of Morocco’s occupation and the holding of the referendum, and turn it into one about the Polisario, whom you should portray as a separatist group driven wholly or predominantly by Marxist or Islamist ideology. Ideally you should transform the debate into one about the historical origins and legitimacy of the Polisario, which you should misrepresent. Your aim should be to discredit the Polisario through accusations of slavery, child abuse, terrorism, human rights abuses, communism, and Islamic fundamentalism. People should be left with the opinion that the Polisario are so reprehensible that the Sahrawi, whom they represent, do not deserve independence. By contrast Morocco should be portrayed as a champion of democracy and human rights which offers a much better future.

2. Emphasise that independence is not realistic and that those who support the referendum are seeking to prolong the conflict and are just causing more suffering for the people in the Tindouf camps. Pretend that your concerns are for the well-being of the Sahrawi refugees (although insist elsewhere that they are not refugees and many are not Saharawi), thus making your opponents appear callous and uncaring about the refugees - make it clear that anyone who disagrees with you is guilty of using the refugees as political pawns in pursuit of a sinister political agenda.

3. Portray the Tindouf camps as detention centres in which people are held against their will. Morocco has the best interests of the people in the camps at heart - they want to be Moroccan.

4. Emphasise the nature of the conflict as one between Algeria and Morocco, rather than between Morocco and the Polisario, and insist on Algeria’s links to terrorists, Marxists/communists and Islamic fundamentalists. Always emphasise the leftist or “eastern-block” nature of the countries that have historically supported the idea of independence - your audience is predominantly a western one and this will help to discredit the idea of a referendum on independence.

5. Accuse any foreigners supporting the referendum of being in the pay of Algeria, and any Sahrawi or Moroccan groups who question Morocco’s occupation of belonging to irrelevant, extremist, fringe political groups. It is very important to persuade people that those who disagree with the position of the Moroccan government are a tiny minority whose views do not count.

6. Emphasise the benefits that Morocco is bringing to the occupied areas of Western Sahara - the issue is really one of development, not invasion and occupation. Opponents of autonomy within a greater Morocco are ill informed extremists and are against modernity and development.

7. Deny that the Polisario controls a significant part of Western Sahara and portray this as a buffer zone set up by Morocco in cooperation with the UN. Accuse anyone talking about the “Free Zone” of propaganda. Very few people have been to the Polisario-controlled areas, and most people do not know that they exist, thinking instead that Morocco controls all of Western Sahara. It is very important to maintain this impression.

8. Give the impression that the UN and the international community support Morocco’s position and its autonomy plan, and see this as the only realistic option. Insist that Morocco’s autonomy plan is compatible with the principle of self-determination.

9. Invoke the views of international bodies when they support the Moroccan position, but dismiss views from the same bodies when they appear to support the holding of a referendum or the idea of independence. For example, cite UN envoy van Walsum’s controversial comments that independence is unrealistic, but dismiss the original UN resolutions on Western Sahara as irrelevant.

10. Dismiss countries that recognise Polisario as the legitimate government of Western Sahara as irrelevant, usually Marxist, regimes. Similarly, argue that the original rulings of the UN on the need for self-determination are irrelevant because the security council was dominated by leftist governments whose opinions should not count.

11. Portray the conflict as a hangover from the Cold War rather than a conflict about decolonisation. Emphasise that it was a manifestation of the conflict between Western capitalism and Eastern communism, which the West won. Emphasise that the Polisario and the independence cause had support from the East - the message should be that, being on the losing side in the cold war, the Polisario and Algeria should give up the independence struggle as the world has moved on.

12. Make lots of stuff up and don’t worry about consistency - it doesn’t matter if many of your assertions contradict each other: if you push them hard enough some of them will stick.

13. If people remain unconvinced by all the above tell them to shut up and write, PREFERABLY IN CAPITALS, that they are not impartial/objective, that they have no credibility or authority to speak about the topic, that they do not understand the situation, and that they must be in the pay of Algeria and the Polisario.

I’m sure we can add to this list - suggestions are welcome.

I hope Ahmed Salem appreciates the attention I’ve devoted to him. He’s always telling me off for not linking to pro-Moroccan websites on this blog. While this is a bit rich given his sole focus on links to CORCAS and other pro-Morocco, anti-Polisario websites, I’ll let that pass and hope that this post redresses the balance. I’m sure he’ll appreciate my collecting his works and presenting them as a set of handy links alongside the one to CORCAS. Maybe he’ll do us the honour of commenting again here, saving me the trouble of more harvesting of his opinions from other sites.